Nunca Digas nunca- Amy Lab

Nunca Digas nunca- Amy Lab (Reseña)

Titulo: Nunca digas nunca
Autoras: Amy Lab
Editorial: Alfaguara

La vida de Jacq da un giro trágico e imprevisto cuando pierde a sus padres y se ve obligada a trasladarse a un pueblo de la sierra de Madrid. Mientras trata de reponerse, tendrá que adaptarse a un país que le resulta ajeno y a un grupo de desconocidos, entre ellos, Samuel. Pronto se hará un hueco entre su pandilla e irá gan ándose la confianza de todos, excepto la suya. Pero, ¿qué es lo que le ocurre a ese chico? ¿Cuál es la razón de ese halo enigmático que lo envuelve? Jacq no puede evitar hacerse preguntas acerca de este extraño que ahora duerme en la habitación de al lado y por el que empieza a sentir algo que se niega a reconocer. Las tardes en el bar, las risas en el lago y las fiestas nocturnas se convertirán en su día a día, pero tras todo ello se guarda un secreto que todos conocen y que nadie parece querer desvelar. Cada gesto es una señal; cada trozo de pasado, una pista que seguir y a Jacq se le acaba el tiempo. ¿Será capaz de unir todas las piezas del misterio? ¿Será más fuerte ese fantasma que el amor que comienza a sentir?

Al leer esta reseña notarán mi actitud de amor/odio por este libro ¿Les ha pasado que en ocasiones tiene un libro del cual saben su contenido no es el mejor pero sin embargo termina gustándoles? Bueno sin más rodeos, comienzo por decirles que “Nunca digas nunca” es una novela entretenida y hasta ahí.

La novela está contada desde 3 puntos de vista: la de Jacqueline, Samuel y Sandra (que posteriormente se hará la mejor amiga de Jacq)
La historia en si no aporta nada y se me hizo muy obvia, pero me agrado más de lo que ustedes creen.
Con una escritura sencilla, se devora muy rápido, llevaba más de 300 páginas leídas y no sucedía nada “importante”, además de diálogos que me dejaron mucho que desear, pese a todo lo que menciono… el libro logra enganchar a sus lectores.

Jacquelin (Jacq) ha perdido a sus padres en un accidente y tiene que mudarse con su tía de España e iniciar una vida nueva, con nuevos amigos y costumbres, al parecer todos los miembros de la familia están dispuestos a ayudarla a adaptarse.
Ella nota que su medio primo Samuel es bastante distante y parece vivir en su propio mundo, pero pronto descubrirá que eso se debe a lo que le ocurrió en su pasado.

Realmente me hubiera gustado que profundizarán más respecto a la perdida de los padres de Jacq y a su sentir, ya que solo se quejaba por el hecho de estar en un lugar al cual no pertenecía y de cómo extrañaba a su amiga Phoebe (muy simpática por cierto).

Ya en Ashford me costaba encontrar mi sitio y ahora… He pasado de ser la rarita española de Ashford a convertirme en la rarita yanqui de aquí. Siempre había tenido muchísimas ganas de salir de allí, porque me estaba asfixiando, y ahora lo echo tanto de menos…

No tenemos una, sino dos historias de amor y debo confesar que de las dos mi favorita sin duda fue la de Sandra y Marcos sobre todo por esa manera en la que se llevan tan divertida y la confianza entre ellos.

Los personajes secundarios son buenos en su mayoría aunque nos encontramos con el típico chavo guapisimo que ni una chica le dice que no, la chava rica que es una arpía  y demás chicos del grupito que como verán son personajes muy simples, pero a los cuales les puedes tomar cariño.

Algo que realmente destaco mucho del libro y me gustó bastante es que hablaran sobre canciones y artistas conocidos, Así como de las redes sociales y distintos tipos de mensajerias que hoy en día todos usamos.

En resumen las dos escritoras españolas bajo el seudónimo de Amy Lab nos ofrecen una novela realista, donde los personajes cometen errores. Amores que no se dan a primera vista (cosa que agradezco mucho), y un toque de misterio.

Lentamente se había ido acercando a él, con su sonrisa y su dulzura, con su bonito acento y sus canciones. Se había ido haciendo un rinconcito en su vida y en la de todos los demás, discretamente, sin hacer ruido, demostrando una inteligente prudencia.

-Lo de raritos nos debe venir de familia, ¿no? Porque te juro que muchas veces tengo la sensación de que mi nave me hubiera abandonado en este planeta extraño…

PUNTUACIÓN:

*Gracias a la editorial Alfaguara por el ejemplar*